SEMERGEN denuncia que un tercio de los pacientes con indicación clara de anticoagulación no lo están recibiendo
La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) ha presentado un documento de posicionamiento sobre el uso de los anticoagulantes orales de acción directa (ACODs). Con él, la Sociedad apuesta por el refuerzo de la formación clínica del médico de Atención Primaria porque, a pesar de estar científicamente probados los beneficios que aporta el tratamiento anticoagulante en pacientes con fibrilación auricular (FA), la realidad es que un tercio de los pacientes con indicación clara de anticoagulación no lo están recibiendo.
En la presentación del documento, en la que han participado José Luis Llisterri, presidente de SEMERGEN; José Polo, vicepresidente de SEMERGEN; Sergio Cinza, director de la Agencia de Investigación de SEMERGEN y Miguel Ángel Prieto, vocal de la Junta Directiva Nacional de Congresos y Jornadas de SEMERGEN, se ha incidido en que la prescripción de los ACODs está supeditada a la gestión de un visado de inspección, el cual recoge las condiciones clínicas incluidas en el Informe de Posicionamiento Terapéutico (IPT) de la Agencia Española del Medicamento.
Además, la Sociedad ha señalado que las diferentes comunidades autónomas imponen medidas de restricción en la prescripción de ACODs. “Un paciente que viaje por España debe gozar de la misma cartera de servicios vaya donde vaya”, subraya Juan Manuel Ortiz Carranza, presidente de la Asociación Madrileña de Pacientes Anticoagulados & Cardiovasculares (AMAC).
Por ello, desde SEMERGEN consideran que la eliminación de dicho visado y la adecuación de la prescripción a las recomendaciones de las guías de práctica clínica, son dos aspectos fundamentales para contribuir a la supresión de las actuales barreras administrativas y clínica. “Los ACODs han demostrado ser mejores que los antagonistas de la vitamina K, tanto en la protección frente al ictus, como por un menor riesgo de hemorragias intracraneales y mortales. Aunque en un principio sólo había datos provenientes de los ensayos clínicos, y no de vida real y por lo tanto exigían cierta cautela, en estos momentos no hay ninguna duda de que suponen, no ya una alternativa, sino un mejor tratamiento que los antagonistas de la vitamina K en los pacientes con fibrilación auricular no valvular con indicación de anticoagulación”, explica Carlos Escobar, cardiólogo del hospital de La Paz.
“Es fundamental conseguir una optimización en la prescripción de este tipo de fármacos, así como en conseguir que el médico de familia pueda recetar aquellos fármacos que considere seguros, eficaces y eficientes, como ocurre en el caso de los ACODs”, añade Llisterri.